Sabor antiguo - marzo 2009

Tengo que decir que se organizó una fiesta al más puro estilo Paloma y tuvo un cierto sabor a antiguo; antiguo por las hamburguesas que tomamos en uno nuestros locales de bachillerato y universidad, con esa decoración e iluminación que no cambió en absoluto en ventitantos años, y por no cambiar, no había cambiado ni el camarero, que no sé si será el dueño, pero lleva en esa plaza desde casi la segunda república. Las hamburguesas como siempre, la misma carta de entonces, las mismas mesas, las mimas sillas y la misma gente en la puerta, porque como era norma de la casa no se puede reservar.

Y para que todo tuviera este estilo, no se lo ocurrió otra cosa que llevarnos a cantar, tengo que admitir que idea original y genial, muy buena. Tan buena que casi todo el mundo pasó por el micro, copas y canciones y también cierto aire antiguo, no por nosotros sino por el ambiente y cincuentona clientela del lugar. Hasta había unos tipos que se hacían llamar Los Mismos que cantaban cada diez minutos alguna taradilla que más que Los Mismos se parecían a los Sirex.

Por nuestra parte, Bea y Paloma nos hicieron recordar las fiestas y el carro del charli, cantando y bailando, Ah, Ah,Ah Al borde del mar …me tumbo en la hamaca y no quiero trabajar…. ¿os acordáis? Momento estelar tuvo la pareja de Cristina y Paco o mejor dicho Pimpinela, tengo que reconocer que por mi parte sorprendido, divertido, y que decir de Tere y Luis en el escenario que despertaron la vocación periódistica de Marcos por el momentazo (que diría Paloma) de semejantes cantantes en directo. Nos queda Paloma, que salió a cantar con todos y en solitario, se lo pasó como no está escrito, disfrutó como nunca, cantó hasta con un desconocido aires de los bastos hace también 25 años. Se me olvidaba, cuando ya nos íbamos a ir los últimos de Filipinas, esperando que saliera en pantalla alguna de las cuatro canciones que eligió Paloma para mi (y que nunca salieron) apareció el Waterloo de ABBA, intérpretes Rocío y Paloma, momento también para no olvidar, Rocío en el escenario, y qué resaca al día siguiente, aunque por lo que he podido leer y algún mensaje más que recibí el sábado no fue la única, ¡…y qué demonios!